Feminismo vs Hembrismo

     Peco de varios defectos, como todos los humanos del planeta. Soy perezosa, soy apática, a veces un tanto grosera, y sobre todo soy pesimista. Sin embargo, esos cuatro defectos míos no se comparan en nada contra mi favorito: pelear por Internet (o querer tener la razón en línea). No lo puedo evitar. Es algo que me apasiona. Un buen debate, un agitado «intercambio cordial» de ideas. Es como un perro agresivo que le ladra a tu peor enemigo: por fuera dices «¡perro malo!» para guardar las apariencias pero cuando nadie te ve, le das un apapacho orgulloso y dices «eshte esh mu purru bunito... ¿quién lo quiere ushté? Añuñuñú». Ni modo. Demándenme.
     Cierto día me encontré en Facebook una discusión tipo flamebait sobre «¿Quién es mejor: el hombre o al mujer?» y términos como «feminazi», «machismo», «feminista» empezaron a surgir, lo típico. Entonces, leí una frase que me llamó la atención y casi hace que me caiga de mi silla: «¡Que chingue a su madre el machismo y el feminismo!», y lo peor de todo es que se estaba llenando de likes. Entonces yo, como la Madre Teresa de Calcuta cibernética que soy, vi la oportunidad perfecta de entregar luz y conocimiento a este pobre hombre que en la más noble de sus intenciones, acababa de contradecirse al mandar a la beis al machismo y de igual forma apoyándolo.

     Primero lo primero, definamos los términos. La Real Academia de la Lengua define:
• «machismo»: “1. m. Actitud de prepotencia de los varones respecto de las mujeres.”
• «feminismo»: “1. m. Ideología que defiende que las mujeres deben tener los mismos derechos que los hombres.”

     Apreciemos la diferencia: el machismo es la actitud que propone un favoritismo al hombre con respecto de la mujer mientras que el feminismo es una ideología que propone la igualdad entre hombres y mujeres. Es aquí donde el comentario del joven me llamó la atención, porque me he percatado que la gran mayoría de las personas, incluyendo las mujeres, tienen la idea errónea que el feminismo es una supremacía de la mujer respecto del hombre. ¿Entonces de dónde viene el término «feminazi»? Éste término es usado primordialmente por un machista (o un machista disfrazado o ignorante de su propio machismo) para ridiculizar a una mujer que defiende la igualdad, o para desmoralizar el movimiento (recuerden: al machista le encanta hacer sentir menos a una mujer para poderse sentir superior). Esto lo puedo comprobar también al momento debido a la cantidad de comentarios que vi del tipo: «feminazis ardidas en 3, 2, 1...» en esa misma publicación donde se intentaba lograr una pequeña e ingenua guerra de los sexos.

      ¿Cuál sería el término correcto para referirnos a aquella corriente donde el pobre patriarcado se ve oprimido por la tiranía femenina? La Real Academia no reconoce esta palabra (¡seguro es machista!), pero Wikipedia nos muestra lo siguiente:
• «hembrismo»: "neologismo en español usado para referirse a la misandria o desprecio a los hombres." ¿No saben qué es misandria? Me lo imaginé.
• «misandria»: “f. cult. Aversión a los varones.” En otras palabras, es el antónimo de misoginia. Ya si no pueden deducir por obviedad qué significa «misoginia», tengo el siguiente enlace para ustedes: http://lmgtfy.com/?q=misoginia.

     ¿Pueden observar lo mismo que yo? El nombre de los términos que predican la superioridad de un género sobre otro hacen referencia al sexo «animal», por llamarle de alguna forma mientras que el término «feminismo» nos recuerda al género. ¿Cuál sería el equivalente masculino de «feminismo»? ¡Pregunta capciosa! A mi punto de ver no existe tal equivalente, puesto que el feminismo pide una igualdad de género, y ponerle un nombre aparte (como uno masculino) no sólo es absurdo sino innecesario.

     Esto me lleva a mi siguiente, y último, punto: considero que usar la palabra «feminismo» para pedir una igualdad de género es incorrecto. El nombre por sí sólo no da lugar para un aspecto masculino: la palabra «feminismo» es completamente mujer y no hay nada igualitario en esto, brindando así las facilidades para confundir este término con el hembrismo; el nombre en sí mismo favorece a la mujer sobre el hombre. (¿Quizá es el «-ismo»?) Yo como mujer no soy partidaria del hembrismo: creo que una mujer es tan capaz como un hombre, y un hombre no es menos hombre por entregarle a la mujer la oportunidad de desarrollar roles que tradicionalmente son exclusivos de los caballeros. También estoy consciente que una mujer tiene ventajas y fortalezas, y no por no poder desempeñar un papel tradicionalmente masculino es menos mujer: pagar la cuenta del restaurante, abrirle la puerta a un caballero, cederle un asiento. Los hombres y las mujeres tenemos nuestras limitantes físicas y mentales así como las mismas limitaciones biológicas. La igualdad entre nosotros, hombres y mujeres,  radica en la empatía, la comprensión, la tolerancia, el respeto y el sentido común.

     El término que propongo para usar de ahora en adelante es simple y directo al grano, lo que le entrega una belleza peculiar al no hacer referencia hacia algún género en particular:


     Igualdad de género.

~~~*~~~

• Real Academia de la Lengua Española
   (machismo) http://dle.rae.es/?w=feminismo

• Real Academia de la Lengua Española
   (machismo) http://dle.rae.es/?w=machismo

• Real Academia de la Lengua Española
   (misandria) http://dle.rae.es/?id=PNfUuIF

• Wikipedia
  (diferencia entre género y sexo) https://es.wikipedia.org/wiki/Distinci%C3%B3n_entre_sexo_y_g%C3%A9nero

• Wikipedia
   (hembrismo) https://es.wikipedia.org/wiki/Hembrismo



---------
Todos los textos e imágenes publicados son copyright ©2010-2016, AwesomeKilljoy A menos que se especifique lo contrario.

«Él me disparó, bang bang, mi amor me disparó...»

       Podría decir que tú has sido el sueño más bonito que he tenido, pero han habido otros antes de ti y mi sueño más bonito es siempre el actual, como cuando se vuelve tu libro favorito aquel que lees en el momento. Lo que sí puedo asegurar de ti es que, irónicamente, has sido único, como todos los demás.
       No intento ofenderte, cosa que he hecho sin querer desde el día que te conocí y quizá desde antes de conocerte, sólo intento ser honesta. Fue lo que me pediste, ¿no? Es curioso cómo las palabras que imagino en mi mente, inofensivas y dulces, se agudizan conforme salen de mi boca y se afilan en el trayecto hacia tu pecho, clavándose, duro, hasta el fondo, fuerte...  Lo que no imaginas, quizá, es que estas armas tienen un doble filo, porque terminan por lastimarme a mí también cuando me pides que ya no te haga sufrir.

      Sí... así... no te detengas.

      Dulce ternera que ahora has entrado a mis fáuces, llora para mí, porque me pierdo en el dulce gemido de tu voz, en la sal de tu llanto, porque lentamente se muere el último suspiro de inocencia que habita en mi pecho, dejando lugar a la vampiresa, a la súcubo, a la psicópata que se bañaría en tu sangre a la luz de la luna. Es lo último que me queda, si ya confirmé que no soy capaz de amor incondicional, si nos hemos vuelto en erizos, si no puedo dejar de temblar cada vez que pienso en ti, y no por tu sexo sino por tu dolor, entonces lo único que puedo hacer es intentar ser lo que nunca quise ser. ¿Me estoy explicando? Yo sé que me entiendes, ¿verdad? Entiéndeme, por favor... porque yo no puedo entenderme ahora.

     ¿Quién soy? ¿Quién es ésta? No puedo ser yo, no me reconozco... ¡regresa!

     No te resistas al cambio, el lado oscuro de la luna también tiene galletas.

     Shhh, shhh... es mejor el silencio... es mejor la distancia, es mejor que me vuelva un fragmento de tu imaginación, un destello de una fantasía que olvidarás cuando ella te gima en tu cama.


     Bang, bang...
---------
Todos los textos e imágenes publicados son copyright ©2010-2016, AwesomeKilljoy A menos que se especifique lo contrario.